El colchón no es el único producto que nos asegura un descanso reparador, ¿o sí?
De lo contrario, no existirían más productos de dormitorio en el mercado, como bases de cama, toppers de gama alta y, por supuesto, nuestros queridos nórdicos.

Si despiertas con dolor cervical, tensión en la espalda o quizás una cefalea intensa, es posible que el problema esté en tu almohada. Y es que, si lo piensas, las mejores almohadas tienen una misión importante: soportar el peso de tu cabeza durante el sueño y mantenerla perfectamente alineada con el resto del cuerpo.
Pero, ¿cómo elegir la almohada ideal? Pues, te daré algunos trucos. La regla de oro es comprender que no todo durmiente necesita lo mismo. Tu pareja puede descansar plácidamente sobre una almohada viscoelástica suave, pero puede que tu cuerpo necesite algo mucho más firme.
En pocas palabras, mereces tener a la mano un producto que se adapte 100 % a tus necesidades. ¡Ni más ni menos que eso! Para ello, tendrás que echarle un ojo a varios elementos, desde la firmeza de la almohada hasta tu postura preferida para dormir.
Si tu mente ha quedado dando vueltas, ¡no te preocupes! Te traigo una estupenda guía informativa para ayudarte a determinar qué almohada comprar la almohada ideal para dormir como un bebé.
Lo primero: ¿Por qué te conviene una almohada perfecta?
Si has llegado hasta aquí, ¡de seguro necesitas una nueva almohada! ¿Quieres saber cómo lo he adivinado? La respuesta, lejos de ser complicada, es bastante simple.
Independientemente de la gran variedad de ofertas que hay en el mercado, existe una almohada perfecta para cada quien, y si no la tienes, tu propio cuerpo sabrá alertarte. ¿Cómo lo hace?
Si quieres eliminar estos problemas de tu vida, necesitas acertar en la compra de tu nueva almohada. En mi experiencia, tener una buena almohada en el dormitorio marca la diferencia entre un sueño plácido sin interrupciones y un mal descanso.
Muchas personas prefieren dejar la almohada de lado -es decir, dormir sin ella- pero, según los expertos, esto no es saludable. La almohada es clave para mantener una correcta alineación cabeza-cuello-espalda.
Cuando no se tiene la más adecuada, los músculos cervicales y lumbares se tensionan al máximo hasta generar otros problemas, como una mala postura, inflamación en los nervios radiales o el agravamiento de la degeneración discal. Ahora sí, veamos qué almohada elegir,
Guía definitiva para elegir la almohada adecuada. ¿Qué almohada comprar?
Escoger una almohada de ensueño, además de ayudarte a dormir bien, evitará que tu cuerpo sufra de otros problemas de salud, como dolores asociados a la postura, insomnio, fatiga, cansancio mental y depresión.
Sin embargo, hay tantas opciones en el mercado que escoger una almohada -y no miles de ellas- podría parecer una misión imposible.

¿Realmente es difícil elegir la almohada perfecta? ¡No tanto! Tan solo necesitas tener en cuenta algunos factores de compra:
Dime tu postura preferida para dormir...
...Y te diré qué almohada comprar. La altura de tu almohada ideal debe ajustarse a la posición que habitualmente usas para dormir.
¿Quieres saber mi truco infalible para no equivocarme a la hora de elegir almohadas? Párate erguido y mide el espacio que hay entre la punta de tu hombro y la base del cuello; esto en caso de dormir de lado.
Si duermes boca arriba, apoya la espalda en una pared y mide el espacio que hay entre ella y la curva más pronunciada de tu cuello (justo en la nuca).
¿Sabes cuáles son tus gustos personales?
¿Cómo debe ser la almohada para dormir bien? No todas las personas se sienten cómodas con el mismo diseño. ¿Me refiero a la posición de dormir? No exactamente (o, mejor dicho, no solamente). Sufrir de calor nocturno, dormir al borde de la cama o la frecuencia de uso también puede ayudarte a determinar qué almohada comprar.
¿Sabías que... ya probé una almohada con altavoces integrados? Te dejo aquí mi reseña de la HappySleep de Senso G. Si no sueles moverte mucho al dormir y te gusta relajarte con música o sonidos de fondo, ¡podría ser ideal para ti!
No todo el mundo necesita la misma firmeza

La firmeza ideal también varía dependiendo de la postura del durmiente.
Yo suelo dormir de lado y me van muy bien las almohadas de viscoelástica, viscogel y látex natural. ¿La razón? Le brindan un buen soporte a mi cabeza sin dejar de ajustarse a las curvas de la zona craneal.
Además, ¡mantienen su forma a lo largo del tiempo! Esto es estupendo porque te garantizará un descanso óptimo noche tras noche (durante muchos años).
Recuerda. Hay personas que deberían dormir en una almohada un poco más o menos firme, pero se sienten mucho más cómodas con otra. Ten en cuenta tus gustos a la hora de determinar qué almohada comprar.
Tu peso también es útil para elegir almohada
Si eres un ávido lector de Alsobre, ya sabrás que el peso es un factor determinante a la hora de comprar un colchón. Pero, ¿sabías que también te puede ayudar a escoger la almohada perfecta?
Generalmente, mientras más pese el durmiente, más presión sobre el colchón ejercerá y viceversa. ¿Qué quiere decir esto? Que el espacio que hay entre la cabeza-cuello y la superficie de la cama podría reducirse notablemente.
Teniendo esto en cuenta, hay un par de leyes relacionadas con el peso ante la compra de una nueva almohada:
Estas leyes deben aplicarse en combinación con otros factores, como la postura para dormir y el nivel de firmeza del colchón. No obstante, pueden darte una buena idea del tipo de almohada que deberías llevarte a casa.
¿Sufres de calor nocturno? ¡Transpirabilidad!
Un buen nivel de transpirabilidad no solo te asegura un descanso reparador y sin microclimas desagradables: también es importante para impedir la acumulación de humedad y, con ello, la proliferación de hongos y bacterias.
Aunque siempre deberías buscar un diseño que permita la aireación interna, una almohada transpirable es un must para quienes suelen sufrir de calor nocturno.
Dentro de los rellenos menos transpirables encontramos a las almohadas de poliuretano y a las almohadas de plumas. Si las tuyas son de plumón de oca, ¡mejor resérvalas para el invierno!
Elegir una almohada con las medidas perfectas
Ya sabes cómo calcular la altura para elegir la almohada perfecta. ¿Falta algo? ¡Las demás medidas! Lo ideal es que el largo de la almohada supere al de tus hombros.

Eso sí: considera el tamaño de tu colchón y a tu pareja. (No querrás que tu almohada sea demasiado grande e incomode al otro durmiente).
Ten en cuenta el nivel de firmeza de tu colchón
¿Qué tiene que ver la firmeza de tu colchón a la hora de elegir almohadas? Pues, mucho (aunque te sorprenda). ¿Confundido? ¡No lo estés! Voy a darte un par de consejos que te ayudarán a aclarar tu mente:
Colchones de firmeza suave
Los colchones de firmeza suave suelen amoldarse muy bien al cuerpo, en especial si tienen viscoelástica dentro de su composición.
Colchones de firmeza media-alta
Los colchones de firmeza media-alta pueden ser más o menos adaptables. Quienes duermen de lado o boca arriba en un colchón como este pueden escoger una almohada estándar, es decir, de altura y firmeza media. Las almohadas cervicales también son una buena opción, en especial si sufres de tensión en el cuello o dolores de espalda.
Si duermes boca abajo, busca una almohada con poco espesor y de firmeza suave. Hay algunas con diseños especiales para esta posición particular. (No estaría de más echarles un vistazo)
Colchones de firmeza alta
Aquí, el punto importante es rellenar la separación entre la curvatura más pronunciada de tu cuello y el colchón, que será mayor que en los casos anteriores.
Si estabas buscando los mejores colchones de firmeza alta, te recomiendo que te pases por nuestras guías.
El relleno y los materiales de fabricación de la almohada importan

Anteriormente, las almohadas solían contener rellenos de plumas, plumón, lana, algodón y otras fibras naturales. Por su elevado coste, comenzaron a aparecer otras opciones, como las plumas sintéticas.
Sin embargo, el mundo del descanso ha evolucionado enormemente abriéndole paso a otros materiales. ¿Cuál es el mejor material para una almohada? Todo dependerá de tus gustos y necesidades (y también de tu presupuesto).
Almohadas viscoelásticas
La viscoelástica no es un material nuevo. De hecho, fue una invención que la NASA comenzó a utilizar en la década de los 60 para reducir la presión y promover la buena circulación sanguínea de los astronautas al momento del despegue.
En 1990, la viscoelástica llegó para quedarse en el mundo del descanso. Hoy día, es codiciada por su capacidad de adaptarse a las curvas del cuerpo. Elegir una almohada viscoelástica para el dormitorio puede ser una buena opción si:
¿Es lo que buscas? No pierdas ni un minuto y elige entre las mejores almohadas viscoelásticas.
Almohadas de viscogel
Las almohadas de viscogel combinan la flexibilidad, adaptabilidad y reducción de presión de la visco con micropartículas de gel. ¿Para qué?
¿Cuándo escoger una almohada de viscogel? Las recomendaciones son las mismas que en el caso anterior con un solo añadido: si sufres de calor nocturno, ¡esta será la almohada ideal para ti!
Almohadas sintéticas
Dentro de esta clasificación encontrarás varios tipos de relleno, pero los más comunes son los de fibras sintéticas de poliéster (un material suave que genera una sensación similar a la de las almohadas de plumón) y los de espumas de poliuretano.
Las almohadas de fibras sintéticas son de firmeza baja, no generan calor, son bastante económicas y se pueden lavar en la lavadora sin miedo a que se deformen. Si tu presupuesto es ajustado y sueles dormir boca abajo o de lado, podrías llevarte a casa una almohada como esta.
Las almohadas de espuma de poliuretano tienen una firmeza media que se va perdiendo con el tiempo. También son económicas, pero no son aptas para asmáticos o personas alérgicas. Las recomendaría para dormir de lado, siempre que tengan la altura ideal.
Almohadas de látex
Las almohadas de látex son similares a las viscoelásticas, pero con algunas diferencias. Si bien reducen la presión y se adaptan muy bien a la forma de la cabeza, no dejan que te hundas en la cama: más bien te mantienen flotando. En el mercado, encontrarás dos tipos de ellas:
¿Qué almohada comprar? ¿Una de látex natural u otra de látex sintético? Si tu presupuesto te lo permite, te conviene escoger almohadas de látex natural porque tendrás, además de ergonomía:
¿A quién le recomendaría elegir una almohada de látex? A alguien que esté buscando una firmeza media o alta, independientemente de su postura para dormir. También puede ser una buena opción para quienes tienen problemas cervicales.
Almohadas híbridas
Las almohadas híbridas están triunfando en el mercado. ¿La razón? Combinan lo mejor de varios materiales para darle al durmiente un producto que pareciera hecho medida. Por lo general, las almohadas híbridas se componen de varias capas. Pueden ser todas de un mismo material con distintas densidades o de varios rellenos.
Algunas son reversibles (una cara para el invierno y otra para el verano) y otras personalizables (podrás quitar una o dos capas para tener una almohada completamente diferente). Esto te permitirá tener un producto de firmeza baja, media o alta; y también de distintas alturas, formas y propiedades.
¿A quién le recomiendo elegir una almohada híbrida? ¡Las opciones son infinitas! Le van bien a cualquier usuario.
Te conviene escoger una almohada fácil de limpiar
En especial si el modelo que tienes en mente tiene un relleno de espumación de alta calidad, como viscoelástica, viscogel o látex. Por lo general, estos materiales no se llevan bien con el agua (o cualquier otro tipo de líquidos), ya sea porque se deforman, absorben humedad o pierden sus propiedades.
¿Mi recomendación? Si quieres escoger una almohada viscoelástica con capas extra de viscogel o látex, ¡busca un modelo desenfundable!
¿La almohada que te gusta no trae una funda con cremallera? Compra una por tu cuenta. Esto te permitirá lavar la funda a máquina cuantas veces quieras sin tener que preocuparte por el bloque de espuma.
Si has derramado algo sobre tu almohada o simplemente quieres limpiarla, ¡Usa métodos de lavado en seco! Espolvoréala con bicarbonato de sodio, déjala reposar un rato y aspira los restos de polvo o haz tu propia mezcla limpiadora. Te dejo mis secretos sobre cómo limpiar una almohada sin morir en el intento aquí para inspirarte.
Consejo. Si la limpieza es lo que te preocupa, ¡evita las fundas de lavado en la tintorería! Te conviene tener un producto que puedas lavar en casa con facilidad y que, de ser posible, sea apto para la secadora.
¿Te has preguntado si necesitas algo especial?
Siempre digo que cada durmiente es un mundo (y lo he demostrado con creces). Dicho esto, hay personas que, dependiendo de su caso particular, necesitan una almohada que destaque por sus características especiales.
¿Qué almohada comprar para alérgicos, asmáticos o fanáticos de la limpieza?
Si sueles sufrir de alergias, asma, tos o simplemente quieres dormir en una superficie limpia y libre de ácaros, hongos y bacterias; te recomiendo comprar una almohada antiácaros.
¿El mejor relleno para combatir a estos animalitos indeseados? Sin duda, el látex, preferiblemente, natural. Recuerda que, para que un producto del descanso tenga este sello especial, debe tener al menos un 85 % de látex puro en su composición.
¿Qué almohada comprar si buscas la mejor en este tipo? Sin duda, la almohada Kipli. En mi opinión, no solo es la mejor antiácaros: también es la mejor almohada de látex que he probado hasta ahora.
¿No te convence mucho la almohada Kipli? ¡No te preocupes! Te dejo mi ranking de las mejores almohadas de látex para que puedas escoger la ideal.
¿Qué almohada comprar para personas que sufren de problemas cervicales?
Lo mejor para el dolor en el cuello y la parte alta de la espalda es la almohada cervical. Esta almohada tiene un diseño ergonómico con un contorno especial que dista mucho de los modelos clásicos. Hablo de una hendidura central que servirá como apoyo para la cabeza.
Su forma nos deja con un borde que calza a la perfección en la zona del cuello y la nuca, haciendo que el soporte y la alineación sean casi perfectos.
Las almohadas cervicales vienen con distintos materiales y rellenos. Algunas incluyen geles para disipar el calor. Otras carecen de inclinaciones o curvaturas para ser mucho más versátiles.
¿Qué almohada comprar para personas que quieren optimizar su descanso?
Hay extras que pueden ayudarte a descansar mejor; esto por sus propiedades especiales. ¿Me refiero al relleno? No necesariamente. El añadido puede ser en forma de fibras, hilos o micropartículas y suele ser de origen natural y orgánico.
¿Qué almohada comprar? preguntas frecuentes
¿Aún no sabes qué almohada comprar? ¿Tienes un par de preguntas rondando en tu cabeza? ¡No te preocupes! He preparado una sección especial para responder las dudas más comunes de los lectores:
El tiempo de vida útil de una almohada está íntimamente relacionado con los materiales. Por lo general, las almohadas más duraderas son las de visco y látex. En cuanto al promedio de duración, no suelen superar los 2-3 años.
La dureza de la almohada depende de los materiales de fabricación. Las más firmes son, generalmente, las de látex y viscoelástica de densidad media-alta.
La altura promedio de una almohada clásica es de unos 12-13 cm. Sin embargo, ya sabes que el tamaño perfecto dependerá de tu postura de dormir.
Si duermes boca abajo, mantente en los 10 cm o menos.
Si duermes de lado, elige una almohada alta de 15 cm como media.
Lo normal es elegir una almohada de firmeza media siempre que no se tenga alguna necesidad especial, como dormir boca abajo o sufrir de dolor cervical; esto por poner tan solo unos ejemplos.
Nuevamente, depende de tu caso particular. Si tienes sobrepeso, sufres de dolores de espalda y duermes boca arriba; te conviene escoger una almohada firme. Si duermes boca abajo o quieres una almohada para un niño, un modelo suave.
Lo más importante en una almohada es la altura, la firmeza y el relleno. Para escoger la almohada perfecta, necesitas tener estos factores en cuenta.
Antes, te habría dicho que en una tienda física. Pero ahora mi respuesta ha cambiado. Las tiendas en línea tienen buena variedad, calidad y precio. Además, algunas marcas te permitirán probar tu almohada en casa por 30, 60 y hasta 100 noches para ver si te conviene.
Las mejores almohadas cervicales del mercado suelen ser de látex natural o de viscoelástica; ambos materiales de alta densidad y de recuperación media o rápida. ¿Por qué? Porque se ajustan muy bien a la complicada zona de la cabeza-cuello-hombros.
Adiós y hasta pronto querid@ usuari@
¡Hasta aquí ha llegado esta nueva guía de compra! Espero que hayas podido aclarar todas tus dudas. Si todavía no estás muy seguro de qué almohada comprar, déjame tu mensaje en los comentarios. Con más detalles, podré ayudarte a tomar una decisión.
¿Todavía con dudas? Ponte en contacto con nosotros explicándonos tu caso o.... déjanos un comentario y así ayudaremos a los siguientes usuarios que visiten este artículo. Muchas gracias 🙂
Antes de irte...
maria eulalia dice
tengo cefalea tensional, y me despierto con dolor de cabeza, a veces me puedo volver a dormir pero otras no porque la cabeza me duele, me compre una tempur para cervicales, pero hay noches que no me va bien porque la encuentro dura , cual me iria mejor, gracias
Alsobre dice
Hola María, espero que estés bien. Lamentablemente, no somos médicos y no podemos darte una opinión al respecto. Te recomendamos acudir al médico y que un profesional te recomiende un tipo de almohada en concreto, así podremos ayudarte a buscarte una con esas características. Espero te sirva, un saludo 🙂